El Narcisista Seguirá Acechándote pero No Debe Importarte: El Abuso Emocional No ha Acabado cuando se Va


Existe una Verdad innegable: El Narcisista seguirá acechándote porque el Abuso Emocional no ha acabado cuando se va. No soportan perder el juego de la inteligencia emocional de las pesonas inteligentes que les hacen la misma ley del hielo, los ponen en desventaja y los ignoran emocionalmente con Indiferencia Emocional, precisamente no desde la manipulación emocional o porque desee dañar al Narcisista Emocionalmente sino porque no entra en el juego, no le interesa y este desprecio colateral, directo y evidente destruye los delirios de grandeza y sentido de superioridad del Narcisista, sea hombre o  mujer, bajándolos del pedestal y colocándoles en la situación de desventaja de su Complejo de Inferioridad. En ese momento, te conviertes en su mayor pesadilla porque le ignoras y le ignorarás de por vida. El narcisista no soporta que le ganes el juego, que note dejes manipular y que tengas la Autoestima muy alta, sea hombre o mujer. El Ego se les Dispara. Son envidiosos patológicamente y viven en un Maremagnum de toxicidad constante del que no saldrán nunca. Su vida es caos aunque se esfuerzan despiadadamente por demostrar que los caóticos son el resto de seres humanos. En realidad, son desordenados emocionales y unos "trastornados emocionales" que no salen de su pobreza emocional porque no saben salir de su infierno mental. El término Narcisista se ha vuelto común en el léxico popular, pero su significado va más allá de la simple vanidad. Se refiere a un trastorno de la personalidad caracterizado por una falta de empatía, una necesidad constante de admiración y un sentido exagerado de autoimportancia. Las relaciones con un narcisista suelen estar marcadas por el abuso emocional, que puede persistir incluso después de que el narcisista abandone la vida de la víctima. Te enseño por qué el narcisista sigue acechando y cómo las víctimas pueden lidiar con este abuso prolongado.

1. El Ciclo de Abuso del Narcisista

El narcisista es hábil en manipular y controlar a sus víctimas. El ciclo de abuso típico con un narcisista sigue un patrón familiar: idealización, devaluación y descarte. En la fase de idealización, el narcisista idealiza a su víctima, ofreciendo amor, atención y cumplidos exagerados. Sin embargo, esta fase es insostenible y pronto da paso a la devaluación, donde el narcisista critica, desprecia y desvaloriza a la víctima. Finalmente, en la fase de descarte, el narcisista abandona a su víctima sin remordimientos, dejando atrás un rastro de dolor y confusión.

2. El Control a Través del Acecho

Para el narcisista, el control es fundamental. Incluso después de haber dejado la relación, el narcisista puede continuar ejerciendo control sobre su víctima a través del acecho. Esto puede manifestarse de diversas formas, como llamadas telefónicas no deseadas, mensajes de texto, correos electrónicos o incluso aparecer físicamente en lugares donde sabe que estará la víctima. El objetivo es mantener a la víctima en un estado de miedo y sumisión, asegurándose de que no pueda seguir adelante con su vida sin la presencia o aprobación del narcisista.

3. La Necesidad de Validación Constante

El narcisista depende en gran medida de la validación externa para mantener su frágil sentido de autoestima. Como resultado, buscará constantemente la atención y la admiración de sus víctimas, incluso después de haber terminado la relación. El acecho es una forma de obtener esta validación continua, ya que el narcisista busca confirmar que todavía tiene poder sobre su víctima y que esta aún se preocupa por él. El rechazo o la indiferencia por parte de la víctima puede desencadenar una respuesta violenta por parte del narcisista, ya que amenaza su imagen de sí mismo como alguien poderoso y deseado.

4. El Impacto en la Víctima

El acecho continuo por parte del narcisista puede tener un efecto devastador en la víctima. Puede provocar ansiedad, depresión, trastorno de estrés postraumático y una sensación abrumadora de impotencia. La víctima puede sentir que nunca podrá escapar del control del narcisista, lo que puede llevar a un ciclo interminable de miedo y desesperación. Además, el acecho puede dificultar que la víctima pueda seguir adelante con su vida y establecer relaciones saludables en el futuro. 

5. Cómo Lidiar con el Acecho del Narcisista

Lidiar con el acecho del narcisista requiere fortaleza emocional y determinación. Aquí hay algunas estrategias que pueden ayudar a las víctimas a protegerse:

- Establecer Límites Claros y mantenerlos firmemente.
- No responder a ninguna forma de contacto por parte del Narcisista. Cortar el Suministro Emocional.
- Buscar apoyo emocional de amigos, familiares o un terapeuta.
- Documentar cualquier forma de acecho y considerar tomar medidas legales si es necesario.
- Trabajar en la propia Sanación Emocional y Reconstruir la Autoestima.

Conclusión

El Abuso Emocional perpetrado por un narcisista no termina cuando la relación llega a su fin. El acecho continuo es una forma de mantener el control sobre la víctima y satisfacer la necesidad constante de validación del narcisista. Sin embargo, con apoyo adecuado y establecimiento de límites claros, las víctimas pueden liberarse del ciclo de abuso y comenzar el proceso de curación. Es importante recordar que nadie merece ser objeto de abuso y que cada individuo tiene el derecho a vivir una vida libre de miedo y manipulación.