Estas creencias incluyen:
1. Sentido de grandiosidad:
Se ven a sí mismos como superiores o únicos, lo que les lleva a esperar un trato especial y admiración constante.
2. Desconexión de la realidad:
Pueden ignorar o minimizar las críticas y realidades que no se alinean con su autoimagen, lo que refuerza su visión distorsionada.
3. Falta de empatía:
Esta incapacidad para comprender o valorar las emociones y experiencias de los demás se basa en su creencia de que sus necesidades y deseos son más importantes.
4. Manipulación Emocional:
Con frecuencia, inventan historias o distorsionan la verdad para mantener su imagen y obtener lo que desean, lo que incluye el uso de mentiras o engaños sobre las personas a las que quiere depredar emocionalmente, sobre todo tergiversando la verdad de los hechos.
Se suele decir que un narcisista es el espíritu de la contradicción es decir "el yo" y el "no". Solo piensan en sí mismos y siempre contradicen a los demás.
5. Necesidad de control:
Buscan influir y controlar a los demás para mantener su propia imagen y estatus, utilizando tácticas como la intimidación o el gaslighting.
Estas creencias son fundamentales para su forma de relacionarse con el mundo y suelen llevar a dinámicas interpersonales problemáticas.